El pasado 5 de julio, tras 27 años de buen y leal servicio, el emblemático cohete europeo Ariane 5 realizó su último vuelo. Esta misión marca el final de un capítulo muy bueno en el espacio europeo, que ahora está entrando en un período más incierto.
Una carrera fenomenal
Inicialmente previsto para el 16 de junio, el lanzamiento número 117 y final del Ariane 5 se ha retrasado debido a problemas con las líneas de transmisión pirotécnica de sus propulsores. El cohete finalmente despegó el miércoles desde el centro espacial de Kourou en Guyana para llevar dos satélites de comunicación a la órbita de transferencia geoestacionaria. Uno de ellos, el Syracuse 4B, está destinado al ejército francés. Fue desarrollado por un consorcio formado por Airbus Defence and Space y Thales Alenia Space.
Realizando su primer vuelo en 1996 sin llegar a alcanzar la órbita, el Ariane 5 se ha convertido en una referencia muy fiable en el sector de los lanzadores pesados. Desde su altura de 56 metros, el cohete lanzó más de 230 satélites, sondas y telescopios. También ha participado en el despegue de importantes misiones de exploración del universo como la sonda JUICE, que estudiará las lunas de Júpiter. También lanzó el telescopio James-Webb, en sustitución del Hubble, que ya ha realizado importantes descubrimientos sobre el cosmos.
“Ariane 5 deja un increíble legado de destreza técnica y confiabilidad. Durante su vida operativa, Ariane 5 ha sido un activo importante para Europa a la hora de garantizar su acceso autónomo al espacio”, comenta un portavoz de la Agencia Espacial Europea (ESA).
“Esta noche fue el último vuelo del Ariane 5, que fue un éxito técnico para Europa en el espacio, y que nos mantuvo abierto el stargate durante muchos años”, conmovió el astronauta Thomas Pesquet en un tuit.
#ICYMI repetición del lanzamiento de esta noche: #ariane5 despega del puerto espacial europeo por última vez con el vuelo VA261… pic.twitter.com/HNTgZ2d0vW
— ESA (@esa) 5 de julio de 2023
Todavía no hay Ariane 6
El sucesor del Ariane 5, el Ariane 6 debería estar en funcionamiento desde 2020. Además de experimentar problemas técnicos, los equipos encargados de su diseño también se han visto retrasados por la pandemia del Covid-19. Se espera que su primer vuelo tenga lugar en 2024, pero no se ha revelado una fecha oficial.
“Hoy sería especulativo mencionar una fecha de lanzamiento. Tenemos que pasar por una serie de pasos técnicos durante el verano, pero prometo que después del verano, en septiembre, indicaremos un período que es el período objetivo para Ariane 6”, indicó el pasado junio Josef Aschbacher, Director General de la ESA. .
Los numerosos aplazamientos del cohete tienen un impacto directo en el sector espacial europeo, que se encuentra sin acceso directo a la órbita. A falta de un lanzador, la Unión Europea se vio obligada a recurrir a SpaceX.