Desde su lanzamiento a fines de 2022, la inteligencia artificial generativa de ChatGPT ha ganado rápidamente popularidad entre una amplia audiencia, incluidos los estudiantes. Sin embargo, esta rápida adopción ha suscitado inquietudes en el mundo académico respecto a la potencial influencia de esta inteligencia artificial (La inteligencia artificial o computación cognitiva es el “encontrar caminos…) en el esfuerzo intelectual de los estudiantes.
Parecería que algunas instituciones se están enfocando de manera desproporcionada en la amenaza que ChatGPT podría representar para la educación. Ven a la IA como un adversario para que los estudiantes entreguen tareas sin autorreflexión.
Imagen Pixabay
La escritura fantasma, o escribir para otros, implica que un estudiante entregue un trabajo como si fuera suyo, cuando fue escrito por otra persona. Esta práctica está cada vez más extendida. Internet ofrece un entorno (El entorno es todo lo que nos rodea. Son todos los elementos naturales y…) propicio para el surgimiento de empresas de escritura fantasma. Por ejemplo, en Nueva Zelanda (Nueva Zelanda es un país de Oceanía, en el suroeste del Océano Pacífico,…), se estima que entre el 70% y el 80% de los estudiantes universitarios utilizan alguna forma de trampa (Hacer trampa es el hecho de no respetar las normas para aprovechar ventajas.Puedes…). Aunque la mayoría de estos actos se llevan a cabo en connivencia con compañeros de estudios o mediante plagio, la aparición de la inteligencia artificial generativa como ChatGPT se considera una amenaza insuperable para la integridad académica.
Es hora de que las universidades cambien de paradigma y acojan esta herramienta (Una herramienta es un objeto finalizado que utiliza un ser vivo para aumentar su…). De hecho, esto podría utilizarse para ayudar a los estudiantes en su aprendizaje (aprendizaje es la adquisición de un saber hacer, es decir, el proceso…). Por lo tanto, herramientas como ChatGPT podrían usarse para traducir términos y conceptos complejos a un lenguaje más accesible, mejorando así la comprensión y el aprendizaje. Este potencial ya es visible en su uso en el campo de la programación informática (La programación en el campo informático es el conjunto de actividades que permiten…).
Dado que el desarrollo de la inteligencia artificial continúa a un ritmo vertiginoso, es crucial encontrar un equilibrio entre los beneficios y los riesgos asociados con su uso en el campo de la educación. Los beneficios, como los que ofrecen las IA como ChatGPT, no deben ignorarse debido a los desafíos que presentan. Por el contrario, estos desafíos deberían impulsarnos a repensar y mejorar nuestros métodos de evaluación y aprendizaje.
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