La semana pasada se estableció un triste récord en la Antártida. Los niveles de hielo marino allí han alcanzado un mínimo histórico. Los científicos advierten que este comportamiento «extraordinario» podría marcar el comienzo de su declive a largo plazo.
A partir del 27 de junio, la extensión del hielo marino en la Antártida (Antártida (pronunciado [ɑ̃.taʁk.tik] Escucha) es el continente más grande…) estaba casi 2,6 millones de kilómetros cuadrados por debajo de la media (La media es una medida estadística que caracteriza los elementos de un conjunto de…), en comparación con el período de 1981 a 2010, según la NOAA (Administración Nacional Oceánica y Atmosférica). Si bien se espera que el hielo marino (el hielo es agua en estado sólido) se acumule rápidamente durante el invierno actual de la Antártida (el invierno es una de las cuatro estaciones en las zonas templadas), esto ya no es comparable con años anteriores.
El hielo marino se retiró casi uniformemente alrededor de la Antártida, excepto en el mar de Amundsen.
Crédito de imagen: NOAA Climate.gov, basado en datos de NSIDC
En comparación con el período 1981-2010, el hielo marino se ha reducido casi uniformemente alrededor de la Antártida, con la excepción del Mar de Amundsen, donde ha aumentado más que el promedio. Actualmente, el hielo marino antártico cubre unos 11,7 millones de kilómetros cuadrados. Esta superficie debería aumentar hasta mediados de septiembre, luego retroceder en la primavera antártica (del latín primus, primero, y tempus, tiempo, esta estación marca una vez el…) y el verano.
La extensión del hielo marino de la Antártida varía más de un año a otro que la del Ártico debido a las diferencias geográficas entre las dos regiones. Los investigadores saben desde hace mucho tiempo que el hielo marino del Ártico sigue una trayectoria descendente a largo plazo, con pérdidas aceleradas y cambios potencialmente permanentes en el paisaje (etimológicamente, el paisaje es la disposición de características, caracteres, formas de un…) vinculado al cambio climático. Las tendencias en la Antártida son menos claras.
Sin embargo, los investigadores midieron los niveles de hielo marino en la Antártida constantemente por debajo del promedio desde 1981 hasta 2010, con máximos históricos desde abril de 2023.
El comportamiento «extraordinario» actual del hielo marino en la Antártida plantea la pregunta de si esto podría ser el comienzo de una tendencia a largo plazo relacionada con el cambio climático o oceánico, pero responder a esta pregunta requerirá más tiempo, datos e investigación (Investigación científica designa en primer lugar todas las acciones emprendidas con miras a…), según los representantes de la NOAA.