Volkswagen ha anunciado que comenzará a probar vehículos eléctricos totalmente autónomos en Austin, Texas, a partir de julio. El grupo alemán acelera con el objetivo de lanzar un servicio comercial para 2026.
Volkswagen espera lanzar vehículos autónomos en otras tres ciudades de EE. UU.
En 2019, Volkswagen llevó a cabo sus primeras pruebas de vehículos autónomos en Hamburgo. En un tramo de tres kilómetros, los e-Golfs, coches urbanos eléctricos, navegaron por el asfalto sin ayuda. Esta vez, diez identificaciones. Buzz, furgonetas eléctricas parecidas a las famosas Combis de la marca, tendrán que lograr el mismo rendimiento en las calles de Austin, Texas. “Estamos encantados de ofrecer nuestros vehículos ID. Zumbido en las carreteras estadounidenses”, se regocijó Pablo Di Si, CEO de Volkswagen en América.
Desarrolladas por su socio Mobileye, filial de Intel especializada en conducción autónoma, las furgonetas han sido equipadas con sistemas lidar, radar y cámara. Antes de que finalice julio, dos de los vehículos previstos comenzarán las pruebas. La empresa especifica que las furgonetas estarán “geo-valladas” y así podrán ir solo a zonas concretas de la ciudad. Volkswagen aún no ha recibido el derecho a circular sin conductor, el ID.Buzz tendrá personas al volante para garantizar, en caso de peligro, la seguridad de los pasajeros y habitantes de la ciudad.
Katrin Lohmann, jefa de conducción autónoma del grupo en Estados Unidos, dice que dentro de los próximos tres años se probarán automóviles sin asistencia humana en al menos cuatro ciudades estadounidenses. “Elegimos Austin como el primer centro de EE. UU. porque la ciudad tiene un historial comprobado de innovación y proporciona un clima propicio para probar vehículos autónomos”, dijo.
Para 2026, Volkswagen quiere lanzar un servicio comercial sin conductor en la capital de Texas. El grupo también tiene como objetivo ofrecer sus coches a otras empresas de movilidad y transporte. Para lograrlo, debería reclutar a ex empleados de la start-up Argo AI.
Esta start-up especializada en el sector, cofundada por Ford y Volkswagen en 2016, cerró sus puertas el pasado mes de octubre. Los dos gigantes habían mencionado diferentes estrategias y, sobre todo, querían detener lo que parecía una hemorragia financiera. Ford aprovechó para recuperar a más de 550 empleados de la extinta start-up. El fabricante anunció en marzo la creación de una nueva filial llamada Latitude AI para desarrollar su sistema de conducción manos libres en la autopista Blue Cruise.